29 Nov La buena por conocer

Todo a lo que le tienes miedo siempre pasa y ese es el punto. El cuerpo con el que besas es el mismo con el que lloras, y nunca sabremos cuál abrazo será el último (lo bueno es que siempre vendrán otros). Todo pasa: primero en tu cabeza, luego en un día cualquiera y después el tiempo se lo lleva. 

Por eso desistí de hablarlo, de decirte que me iría, de darte un beso de despedida. Tu cara se parece a todas las verdades que he evadido y tu cuerpo a mi zona de confort, aunque el otro día quise llorar en tu pecho, pero me di cuenta de que no tenía sentido. 

Me quedé callada muchas veces porque tengo el signo solar en Libra y el corazón en las inseguridades. A ratos uno cree que lo que mantiene vivo el amor es la ilusión del cambio (el del otro, claro) y el silencio no es más que una reproducción de No_Quiero_Que_Creas_Que_Estoy_Loca.mp3. 

Y no es que yo te ame a ti, porque la verdad ni estoy segura de que me caigas bien. Es solo que tu nombre significa todas las cosas que he pospuesto por miedo a enfrentarme a mí: tú eres mi malo conocido y yo la buena por conocer. 

Es que ponerse primero y decir que no, no son cosas que se nos enseñen a las mujeres, pero eso no quiere decir que no se nos juzgue si las hacemos. La vida adulta parece una pelea por quién evade más sus sentimientos que el otro: de un lado están los que lloran antes de dormir o en el bus, y en el contrario los que se vuelven insensibles y ni los memes de perritos los conmueven. 

Yo no quiero entrar en esa pelea, yo no quiero cargar con tantas cosas: yo no quiero tener que poder con todo. Quiero andar liviana, sin tener que protegerme de quienes me rodean y sin esperar “momentos adecuados” para sentir. 

Ojalá hubiera sabido antes que estar preparado no significa que no te duela, que todo es tremendamente relativo, y que precisamente eso es lo difícil de la vida. También habría querido conocer que el amor te hace vivir demasiadas cosas siendo aún muy joven, que uno no vive por lo que sabe sino por lo que cree, y que yo nunca he creído en mí. 

Amarse a sí misma es algo que se aprende en defensa propia.